la glicina llueve
de azulvioleta
...y mis ojos tatuados en su lluvia desde mi comienzo
dibujan un poniente de patios y palmeras
de magnolias y jazmines
de pinos y violetas
y de miles de mariposas que volaron de mi pelo
en medio de la urbanidad
por entonces colorida...
la glicina sigue
su lluvia
fragmentando el cemento*