lunes, 5 de octubre de 2009

Lila, en la mirada de los otros* cap.VI



Hoy Lila cantó la mañana entera. Luego cortó flores y vio acercarse rumorosa a la tormenta.
No hubo más ruidos en la casa.
El día se extendió bochornoso, para alcanzar la tarde sin canto de pájaros. Sólo la lluvia inminente.
Al atardecer no aguanté más tanto silencio. El calor y la desdicha apretaban con fuerza mi cabeza. Me cambié de ropa y salí. El chillido de mi portal de rejas rompió el atardecer.
Por la vereda pasé frente a su casa.
Lila esperaba la lluvia acodada en la ventana.
Crucé frente a ella.
No me vio.


foto* Berenika